Desde el 1 de agosto de 2023 comienza a implementarse un nuevo régimen impositivo que pesa sobre las bebidas con alcohol en Reino Unido. Se trata del mayor cambio que ha experimentado la industria del alcohol en este territorio desde 1975, un mercado significativo para el vino argentino ya que representa el 11,08% del total exportado en dólares al primer trimestre de 2023. Reino Unido es el tercer mercado más importante para el vino argentino en facturación. En el caso del vino y los espumantes, el nuevo régimen impositivo establece nuevas bandas de tributación en función del porcentaje de alcohol de cada bebida que se comercialice en este mercado, donde los que tienen un menor nivel pagarán menos impuestos y más lo que tengan una graduación mayor. Y se unifica el tratamiento impositivo para vinos tranquilos y espumosos.   Según detectó la unidad ejecutora de Negociaciones Internacionales de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) en base a información suministrada por la Embajada Argentina en Reino Unido, el objetivo de esta nueva legislación es crear bandas arancelarias estandarizadas en función del porcentaje de alcohol para todos los tipos de bebidas como son: cervezas, licores, sidras, vinos tranquilos y espumosos, entre otras. Todas las tasas de impuestos que comienzan a regir desde el 1 de agosto de 2023 están calculadas en base al porcentaje de alcohol del producto. Esto reducirá el número de bandas impositivas vigentes para el cobro de impuestos de 15 a 8. Actualmente el vino y el espumoso que se importa y vende en Reino Unido paga de impuestos a las bebidas alcohólicas por botella un total de 2,23 libras en el caso del vino y de 2,86 libras los espumantes. El nuevo esquema escalonado que regirá desde agosto de 2023 establece primero que ya no habrá diferencia entre tranquilos y espumosos. Sólo habrá una categoría unificada de vinos en general.   Donde sí hay diferencias a la hora de tributar es en el porcentaje de alcohol. Los vinos de hasta 8,5% de alcohol pagarán 1,82 libras por botella, los de hasta 9% de alcohol tributarán 1,92 libras por botella en una escala ascendente a medida que se va incrementando de 0,5 puntos porcentuales la graduación alcohólica (ver cuadro).   Para los vinos con hasta 10% de alcohol, el nuevo régimen impositivo implica una baja en la tributación; mientras que lo que tienen de 10,5% a más pagarán más de lo que venían teniendo.   Pero hay un período de transición. El Gobierno británico reconoce que estos cambios tendrán un impacto significativo en la industria del vino, por lo cual ha establecido un período de transición que comienza el 1 de agosto de 2023 y finaliza el 31 de enero de 2025. Durante este período, todos los vinos que tengan entre 11,5% y 14,5% de graduación alcohólica, pagarán el mismo impuesto como si todos tuvieran una graduación alcohólica de 12,5% (ver tabla). Esto es 2,67 libras por botella. Pero a partir de febrero del año 2025, las bandas se diversifican y el vino que se comercialice en Reino Unido deberá tributar específicamente según el nivel de alcohol que tenga. Este nuevo esquema de impuestos alcanza a individuos y empresas involucradas en la fabricación, importación, distribución, tenencia, venta y consumo de bebidas alcohólicas. Y claramente alcanza al vino argentino que se importa y vende en Reino Unido. Un dato más a tener en cuenta es que la tributación fijada en libras se irá actualizando por inflación. Tal como se anunció en el presupuesto de primavera de 2023, el Gobierno Británico aumentará las tasas de impuestos actualmente expresadas en libras a las bebidas alcohólicas según su graduación de acuerdo con el índice de precios minoristas (RPI). Esto incluye todos los productos alcohólicos producidos o importados al Reino Unido. Para acceder a todos los informes del Observatorio Vitivinícola Argentino, los interesados pueden ingresar aquí.