Por: Laura Alturria

Atrás quedaron las más de 300.000 hectáreas de vid que supo tener el país. Sucesivos cambios condujeron a la desaparición de más del 30% de esa superficie para llegar a las actuales 221.202 hectáreas. En el mismo lapso, la cantidad de viñedos se redujo un poco más del 50%.